¡ALLÁ EN SU LECHO DE MARACAY, ARAGUA; VENEZUELA, 17 DE DICIEMBRE DE 1935!...
Después de haber apretado duramente el cuello del sacerdote que lo visitó en su lecho de enfermo, ordena a una de sus hermanas a despedirlo. Su ira tronó contra el religioso, no sin antes advertirle que ´´su jefe (refiriéndose al Papa), es quien ha socavado el poder´´; ´´En qué trabajaría el asotanado ese que haya podido contribuir con el bien de la humanidad´´. ¡María Regina!, exclama, ´´acompáñalo a la puerta para que se marche´´.
El cáncer de próstata avanzado que consumía al dictador lo hacían hablar con los muertos, despertaba de súbito y tropezaba de un lado a otro con los espectros de su vida, llegando a estrellar al suelo una fotografía de su anciana madre, la que, según su percepción, le reclamaba con la mirada sus excesos y desaciertos en veintisiete años de poder ininterrumpidos.
No le faltaron fuerzas ni siquiera al final. Se reincorpora y se sienta en la cama, murmurando en voz alta: ´´a morir viejo, ya está bueno de muchas´´...
JUAN VICENTE GÓMEZ CHACÓN
1857-1935.
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