Asì recuerdo coreaban los que celebraban la muerte de Trujillo y la caìda de la satrapìa; llega a mi memoria en esa navidad de diciembre de 1961 donde comienza a germinarse el caos, sì, porque la disciplina sin libertad es tiranìa, pero la libertad sin disciplina es caos, dijo Cuellen Hightower...
¡Pobre Estado dominicano!, inmerso en el compromiso de reglas de juego foràneas, delincuencia importada con complicidad vernàcula y politiquera, proselitista, de una democracia aparente y difusa, cuya debilidad lo permite todo, menos la seguridad de nuestra gente, hij@s, niet@s...