jueves, 30 de abril de 2015

DÌA INTERNACIONAL DEL TRABAJADOR...

De gran significación histórica, si tomamos en cuenta que la lucha reivindicativa estuvo en manos de los movimientos socialistas, los llamados anarquistas y comunistas. Para esta fiesta del movimiento obrero, celebrado en París en 1889, tres años después de la huelga iniciada el 1 de mayo de 1886, tuvieron que producirse mártires, sobre todo, en Chicago, al lograr como conquista la jornada laboral de las ocho horas.
¡Oh obreros milenarios!, pues descienden de Caìn, según la retórica ortodoxa y de control social religioso que logró crear un inicio de inequidad a través de esas leyendas.
¡Oh obreros seculares!, descendientes directos de esclavos, cuyos logros han sido vastos, si dejamos detrás la fuerza animal y vemos correr la rueda, el accionar de su aceite y carburante, aunque obreros seguimos hasta el fin, montados en las grúas del progreso, la industrialización privada, estatal y la modernización. ¡Oh maldita civilización que me eclipsa los viejos campanarios de mi pueblo...!, dijo Tomàs Morel. ¡Obreros al fin y siempre!, porque sin la inequidad no tiene valor el oro como símbolo de riqueza y dinero. No hay clase obrera, aunque sì obreros con clase; sobre todo aquellos que ya no existen, porque derramaron su sangre en aras del bien común.
No menos cierto es que la igualdad no serà nunca realidad, por lo expresado màs arriba; incluyendo la incidencia de hombres que se la pasan impàvidos con las bocas abiertas, mientras otros trabajan y son creativos; pero es tiempo de separar la fuerza del buey con el peso de la carreta, y que el amargo a hiel que sale de los poros humanos no endulce màs de la cuenta el azùcar, que el alimento regenerador no sea un mendrugo; basta ya de los que mandan y los que obedecen de manera indiscriminada, como dice Maurice Duvergè; los que en pleno siglo XXI siguen considerando ´´sus mejores amigos´´ a los hombres de trabajo, sostenièndoles con demagogia sus callosas manos, por lo entumecidas de sus cabezas, quizàs, abrazando contratos onerosos y exòticos de explotaciòn del hombre por el hombre...

sábado, 18 de abril de 2015

NAUFRAGANDO EN EL TIEMPO...

Porque el trigo de tu piel junto a la miel de tus ojos doran el camino de mis sueños, jamás podría sustraerme a ello, pues la poesía no se resiste a reencontrarse con lugares que pensaba perdidos, olvidados, y la vida en vilo nos encara con modificaciones que borran su historia y entorno, entre otros sitiares de amores que todavía esconden el alma en sus techos desvencijados de abandono.

Como tus pecas ya opacas en ese lindo reír, ¡ oh sureña en pos de ti, recuerdo la casa anclada, de aquel puente separada y los besos que te di...!, allá, entre el hábitat y la carretera, aún siento la brisa aviesa tal si burlase en maldad, entre aldabas balanceadas y el crujir de las bisagras, me dicen ´´ya es otro tiempo, sal de estos sueños en silencio, vete y sigue en la ciudad´´...

domingo, 12 de abril de 2015

TROPEZANDO EN EL CAMINO...

En uno de los duros bancos de un parque florecido, con la belleza primaveral perfumada de abril; así, la humedad de la tímida, pero pertinaz llovizna, ¿descansaba?, ese cuerpo que ya no encuentra posición para dormir o reparar los avatares de su largo camino; con ropa raída, usando en su cabeza, de almohada, sus desgastadas soletas batalladoras en los trillos, mientras sus uñas de pies y manos ya son pesuñas marrones, encorvadas como picos de loros. ¿Quién eres?, le pregunto, mientras me ejercito en el lugar, lleno de una naturaleza con las pinceladas de colores que dan las flores. ¡Soy el camino...!, me responde. ¿Y què podría hacer por ti?, me preocupas. ¡Nada...!, porque usted, replica, ´´ya  no puede con el fardo pesado del trajinar que me invita a descansar, aunque no quiera; pues es el peso de batallar del lado opuesto a la corriente de un mundo que es el mismo, no importa lo milenario, donde  si tienes suerte en tu rebeldía, te catapultas al lado de los inmortales, aunque te maten; y que te humillan y aíslan al plano de los ignorados y huérfanos de oropel y solemnidad, si aún siendo rebelde, no los enfrentas; empero, no todo ha sido malo en el camino, pues llevo amores y placeres, amargor de copas y brillos labiales; acordeón, cuerdas y maracas que me excitan la memoria...´´. ¡Excelente amigo!, y ¿cuál, entonces, es tu norte...?. ¡El llamado Pasado...!!!!.